María Sol González Ferreyra y Mohssine Karouma no se conocieron... se reconocieron.
Ella, española, poeta del alma, escribe desde las entrañas y escucha con el corazón. Él, nacido en Marruecos, maestro y amante de las letras desde su infancia. El destino los unió a través del lenguaje más antiguo: la palabra sentida.